¿Porqué Cuenta Larga?

¿Porqué cuenta Larga? Los mayas tuvieron dos maneras de llevar el calendario: la cuenta corta (el año o tun) y la cuenta larga, de 144,000 días, el baktun, equivalente a 395 años y medio, aproximadamente.

Las organizaciones deberían tomar en cuenta esta filosofía. Hay decisiones de corto plazo (Cuenta Corta) y de largo plazo (Cuenta Larga). Este blog está orientado a las situaciones de largo plazo y su influencia en las organizaciones

lunes, 25 de enero de 2016

Pobres ayudando a pobres


Las remesas que los migrantes a EEUU envían a sus familiares en México significan un apoyo muy importante para la población en estado de pobreza, más importante que los ingresos de Pemex y que los programas sociales del Gobierno.

Hay números que nada más por su magnitud, nos dan mucho trabajo entenderlos. Uno de ellos es el monto de las remesas de los migrantes a sus familiares en México. Entre los años 2011 a 2014 los migrantes remitieron al país casi 92,000 millones de dólares. 23,000 millones anuales, en promedio. No hay datos completos del 2015, pero no hay razón para creer que esa cantidad sea menor. ¿Es mucho o es poco?

A 20 dólares el barril de petróleo crudo, esa  cantidad anualizada es como si exportáramos tres millones de barriles diarios. Actualmente estamos exportando del orden de millón 200 mil barriles diarios.  60% menos que lo que nos llega por remesas. Pero, obviamente, esa no es la utilidad que esa venta deja.

Las remesas de 23,000 millones de dólares al año son  más del triple del presupuesto 2016 de SEDESOL qué, suponiendo que el dólar esté a 18 pesos, serían poco menos de 6,100 millones de dólares, mucho menos de la tercera parte. Y hay que contar con que el dinero que maneja SEDESOL no llega completo a los pobres, sino      que una parte sustancial se queda en la administración. Sería interesante hacer la cuenta de cuanto efectivamente llega a los pobres. Claro, eso es el dinero que entre todos, a través de impuestos directos e indirectos, le entregamos al Gobierno para que, en parte, se use para reducir la pobreza.

Una última comparación. Sí, de acuerdo con la lista de hombres ricos de la revista Forbes, la fortuna que Carlos Slim ha acumulado en 50 años de trabajo fue, en 2015, de 55,200 millones de dólares, quiere decir que cada dos años y medio las remesas de los migrantes entregan a los pobres de México, suman  una cantidad ligeramente mayor.

¿Se nota todo este dinero? Probablemente no mucho. La mayor parte va directamente al consumo de ancianos, niños y madres de familia que, sin esos apoyos, estarían en pobreza extrema. Como lo estarían los migrantes si no hubieran emigrado. Al no invertirse en actividades productivas, tienen un poco efecto multiplicador directo. Pero, claramente, al consumir generan movimiento económico. Y de todos modos, no es demasiado dinero. Si esa cantidad se repartiera por igual a todos los  55 millones de pobres, les tocarían  a 630 pesos al mes o 2500 pesos por familia de cuatro miembros. No es poco, pero no los saca de pobres. Y, claro, no a todos les toca y buena parte le llega a familias de clase media baja.

Lo interesante, creo yo, es que son los  pobres los que más ayudan a los pobres. Y, posiblemente, sean la explicación de porqué la clase media es ya más numerosa que la clase pobre. Aunque muchos no lo crean: el 46% de la población es pobre, lo cual quiere decir que el 54% no son pobres. Si suponemos (no hay un dato oficial al respecto) que el 1% de la población es rico, la clase media es el 53% de la población.

Claramente, esto no es como para concluir que no hay que preocuparnos por la pobreza. Nos debería dar vergüenza que sean los pobres los que más ayudan a los pobres. Deberíamos tener, como en la ciudad de San Salvador, República del Salvador, un Monumento al Hermano Distante, un monumento al migrante que no olvida a los suyos y que se preocupa por su situación. Y que, a través de su apoyo, nos están ayudando a todos. Pero, sobre todo, deberíamos tratar de encontrar un modo de ayudar. En lo personal.

No podemos confiar en que bastará lo que el Gobierno haga, ni podemos solamente lamentar lo que el Gobierno deje de hacer. Es necesario crear empresas para que esos migrantes que no tienen oportunidades en México, las encuentren. Es necesario que se mejoren los salarios a todos los niveles. No podemos seguir buscando competitividad internacional basándonos en salarios bajos. Necesitamos invertir en mejorar la competitividad del trabajador mexicano. Y para ello no basta el salario: hay que invertir en capacitación y en equipamiento. El obrero mexicano bien alimentado, bien entrenado, bien equipado y bien dirigido es tan competitivo o más  que el de cualquier parte del mundo. Y nuestros migrantes lo están demostrando.


Cuando estamos hablando de salir de la pobreza, se necesita voluntad. Pero no basta con la voluntad política. No basta con la voluntad de los empresarios. Se requiere abandonar conceptos añejos que nos han paralizado.  Y convencernos de que todos, TODOS,  tenemos un papel que jugar.

viernes, 8 de enero de 2016

Año Político, a espaldas de la ciudadanía


Este, no cabe duda, es un año especial en la política mexicana. No se juega la sucesión de la actual administración, en forma directa, no cambia el poder legislativo Federal, pero ya se empieza a preparar la sucesión mediante la alineación de fuerzas de frente a las elecciones del 2018.

Para empezar, hay renovación de 13 gubernaturas, casi todas  en los estados menos relevantes de cara a las elecciones federales; la excepción son Baja California y  Veracruz, algunos de los estados más poblados del país. Y además, hay elecciones extraordinarias en Colima.

Todas estas actividades políticas están sirviendo de marco para una realineación de las diferentes tendencias en los partidos. Esto, en buena medida, como resultado del pobre desempeño de todos en las pasadas elecciones federales. Estrictamente, puede decirse que todos los partidos con la posible excepción del MORENA, están profundamente divididos.

La división más obvia es la que ocurre en el PRD. El MORENA es, estrictamente, el resultado de un cisma dentro del PRD. Ha crecido en la medida que el PRD ha disminuido. Hasta el momento, no está claro que esté capturando nuevos miembros que no hayan militado antes en los partidos de izquierda. Pero, desafortunadamente para el PRD, las fuerzas que le quedan están también terriblemente divididas. El tener que traer un nuevo dirigente nacional, Agustín Basave, que no pertenecía previamente al partido, es una clara señal de que no se pueden poner de acuerdo las "tribus" de este partido. Muy rápidamente Basave se ha encontrado en la situación de que se le desautoriza a hacer alianzas con otros partidos, asunto que ya le había sido autorizado previamente. Y, comprensiblemente, dice que así no puede dirigir a la organización. ¿Podrá Agustín Basave lograr un mínimo de concordia entre las fuerzas del PRD? La verdad, es un asunto de vida o muerte para esta institución.

La situación en el PAN no es mucho mejor. Su recuperación en las elecciones del 2015 no fue espectacular, aunque haya recuperado el lugar de la segunda fuerza política. No tanto gracias a sus logros sino debido a la división del PRD. La división entre los calderonistas y  los maderistas sigue vigente y la mejor prueba es la campaña anticipada de Margarita Zavala para ser candidata presidencial. Con o sin el PAN. Tal vez los panistas no estén de acuerdo, pero parece claro que si no regresan a una visión compartida de la política y del papel de su partido en la misma, están condenados a la fragmentación.

El PRI en cambio, aunque no logró los resultados óptimos en las elecciones del 2015, sí logró mediante las alianzas con el Partido Verde Ecologista y el PANAL mantener su gobernabilidad a través del Congreso. Sin embargo, la discordia entre el grupo mexiquense y el grupo hidalguense sigue vigente y siguen ocurriendo las patadas por debajo de la mesa entre estos grupos. Para muestra, un botón: ¿ustedes creen que el artículo de inicio del año en el New York Times atacando al presidente Peña Nieto es algo fortuito? Yo, entre algunos, no lo creo. En  medio  de esa lucha sorda, está navegando Manlio Fabio Beltrones, que no está alineado y se presenta como un factor que aspira a unificar las fuerzas de ese partido.

Como si le faltaran ingredientes a este  caldo político, tenemos además la certeza de que habrá candidatos independientes y que muchos lo intentarán. Cuántos lo logren, eso es otro tema.
No es fácil en este momento decir cuál va a ser el resultado de estas pugnas. Lo que sí es claro es que todas las fuerzas políticas están tratando de buscar alianzas para las próximas elecciones estatales, pero teniendo en el horizonte las elecciones del 2018. Claramente, con sus acciones ya que no con sus palabras están indicando la debilidad que sienten. Sólo el MORENA, como un reflejo del optimismo de Manuel Andrés López Obrador, no ha hablado de buscar alianzas.

Todo este manejo ocurre en lo "oscurito". La ciudadanía no cuenta para la elección de precandidatos para las diferentes gubernaturas, ni siquiera tiene voz ni mucho menos voto en su postulación. No se presentan las posibles opciones, no se discuten abiertamente sus méritos, no se consulta cuáles serían los candidatos que más seguirían los votantes. Todo el manejo ocurre entre camarillas con lo cual, muchas veces, se margina a los propios integrantes de los partidos.

Se ha hablado que en la política de México hay círculos. El más famoso es el círculo rojo, el de los que verdaderamente influyen, los que tienen el poder de imponer candidatos y gobernantes. Tal parecería que nosotros, los ciudadanos, somos el círculo más alejado, el círculo gris, al que hay que organizar, llevar a votar, hacer participar en el día de las elecciones pero sin pedirnos una opinión, muchísimo menos una  decisión.

No es que me parezca que el sistema democrático de los Estados Unidos sea el modelo a seguir. Pero si se ve una diferencia importante en el modo como se manejan las elecciones y lo estamos viendo en este momento en que se preparan las elecciones primarias que  iniciarán en los primeros días de febrero. Todavía no hay candidatos, y ya los precandidatos han empezado a debatir, a publicar, a hacer declaraciones y a pedir su voto a los miembros de los partidos. Todo ello frente la ciudadanía y tomando el riesgo de que ésta, al conocerlos más a fondo, deje de apoyarlos.


En otras palabras: urge que nuestra clase política deje de tomar una actitud paternalista, considerando a la ciudadanía como menores de edad y que se atrevan a presentarse a la luz pública y pulsar la opinión del ciudadano común para poder diseñar programas de gobierno que verdaderamente respondan a las necesidades de la gente y que puedan construir desde el inicio de las campañas una base de confianza para los gobernantes. Conceptos que, desgraciadamente, hoy no están aplicando.

domingo, 3 de enero de 2016

Y Usted, ¿Cómo va a pintar este año?



No, no me equivoqué. La pregunta usual en esta época es: “A Usted, ¿cómo le pinta el año?”. Después de la cual, todos empezamos a hacer especulaciones más o menos infundadas sobre cómo va a cambiar este año, en comparación del que acaba de terminar. Especulaciones teñidas por nuestro optimismo o pesimismo, con nuestras tendencias políticas o ideológicas, con lo que dicen “los enterados”. Por ejemplo, en estos días me decía un conocido: “Este año tiene que ser bueno, porque no es posible que sea peor que el que acaba de terminar”. Muy divertido y sin duda optimista, pero sin ninguna otra base más que la esperanza.

Y los “enterados” no están mucho mejor. En estos días antes del año nuevo, los cinco días aciagos que tenía el calendario azteca, busqué leer comentarios sobre cómo será este 2016. Recuerdo en particular los comentarios de la señora Christine Lagarde, directora del Fondo Monetario Internacional, persona muy enterada. ¿Y qué dijo?:  Escaso crecimiento económico en 2016, para los países desarrollados, menor crecimiento en los países en desarrollo, sobre todo en Brasil, precios bajos para las materias primas, incluido el petróleo, intereses ligeramente mayores, problemas demográficos en los países desarrollados… en fin, la situación de diciembre de 2015, repetida todo 2016. Nada que  cualquiera que lee los periódicos no supiera ya. Decepcionante. Y ese fue más o menos el tono de otros comentaristas.

Reconozco que esperaba más. Algún concepto diferente. Por ejemplo: ¿cómo mejorará la economía de los países con el bajo costo de energía? ¿De qué manera puede impulsarlos? ¿Cómo hará más competitivos a países pobres que usaban petróleo caro? ¿Dónde se están generando nuevos mercados que sean el motor de la economía mundial?  Nada de esto. No cabe duda de que la mayor pobreza del mundo en este momento es la escasez de ideas nuevas, de conceptos poderosos. Las viejas recetas ya no dan para más.

Pero, volviendo a mi pregunta inicial: Usted, ¿qué  va a hacer? ¿De qué color va pintar usted su año 2016?

¿Esperará a que las señales estén claras? ¿Esperará a que alguien le indique que hacer? Bueno, es un enfoque prudente… pero si espera demasiado, para cuando reaccione otros se habrán adelantado y a usted solo le quedarán las migajas. Y esto es cierto para usted en lo personal, para empresas grandes y pequeñas así como para los países. ¿Su actitud será la de agacharse y esperar a que pase la tempestad? ¿O será la de aprender a navegar en medio de la turbulencia?

¿Va a dejar que los Gobiernos compongan las cosas o está dispuesto a hacer su parte? Porque hay mucho por hacer. Por ejemplo:
  • Volverse más productivo en lo personal o en lo empresarial. Prepararse mejor y hacer que su empresa genere más conocimiento y lo aproveche mejor.
  • Buscar nuevos mercados o, mejor aún, crearlos.
  • Pagar  a tiempo a sus proveedores y acreedores. Conozco  empresas muy exitosas, con sello de Socialmente Responsables que están pagando a sus proveedores a tres y cuatro meses, con lo cual contribuyen a la lentitud de la economía, en un momento en que tenemos los intereses más bajo de muchos años y la ganancia por pagar lentamente es mínima.
  •  Pagar lo justo a empleados. En estudios de la ANUIES (Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior) dicen que en este momento se paga a los recién egresados de las carreras universitarias menos que hace una década, haciendo el ajuste por la inflación. Y no hablemos del poder adquisitivo del salario mínimo general o de los salarios mínimos profesionales.
  • Ser más participativo en lo gremial, lo social y en lo político
A un joven muy querido, que me deseaba un buen año, le pregunté: “Y tú, ¿Contribuirás  para que sea un año mejor? Porque esperamos mucho de ti” La misma pregunta me la hago a mí mismo. Y me atrevo a hacérsela a Usted. ¿Cuál va a ser nuestra contribución? Porque la situación, el año 2016, no se va a componer sola